Quiero intentar explicarte lo que siento por dentro
y no por sentirme mejor sino por dejar plasmado el dolor y más tarde al leerlo comprender que es algo efímero y tangible a la vez.
No sé si es el Destino, no sé si me siento viva o si tengo fuerzas para enfrentarme a lo que se me está echando encima, ni si quiera sé qué haré mañana pero sé una cosa y es que amo.
Amo todo lo que me rodea, lo bueno y lo malo, soy de esas estúpidas y soñadoras personas que no quieren perecer en la rutina del ser adulto y aburrido, pienso que todo sucede por algo y sí, lo malo tiene a la larga siempre algo bueno por lo que debía suceder, eso te lo prometo.
Algunos piensan que vivir es hacer lo que te de la gana y están tan equivocados que no tengo la menor idea de cómo asmilar tanta ignorancia del Alma.
Vivir es hacer lo que te de la gana sonriendo porque a los demás no les gusta que lo hagas, vivir es hacer eso que tanto querías hacer y que tanto te habían rogado que no hicieras y al terminarlo, mirarte al espejo y pensar-hice lo que quise-y jamás arrepentirte, porque naciste de un ser divino que te proteje y no hay nada más grande que eso.
Llámame loca pero creo que lo primero que todo el mundo debería aprender es a amar la música, a valorar las letras, comprenderlas y volverte loco por no entenderlas y, a rozar el nirvana porque un puto tono que jamás pensaste que existiera te rozara el corazón y te hiciera una herida.
Creo que deberían enseñarnos la frase "hacer el amor" aplicada a varias cosas y la primera sería "hacerle el amor a la música" sin ninguna duda, y al viento, agua, tierra, fuego, a los rayos del sol y a las sonrisas gratuítas.
Vivir es emocionarte y acojonarte pensando en qué sucederá mañana y entender que todo lo que hagas dejará de importante algún día, que la energía positiva que regales te será devuelta y que a veces es necesario ser cruel.
-Mene Black
